miércoles, agosto 30, 2006
martes, agosto 29, 2006
qué putas que son...
ahora resulta que la mini perrita
con su hilo dental rosa en el orto
¡se va de viaje con el jefe!
me invitaron como un premio
por colaborar en la mudanza
pero no pasa nada dice la muy zorra
¿sabés cómo te va a quedar la argolla
cuando te cobren el viaje nena?
yo sí, cual ojo e buey
con su hilo dental rosa en el orto
¡se va de viaje con el jefe!
me invitaron como un premio
por colaborar en la mudanza
pero no pasa nada dice la muy zorra
¿sabés cómo te va a quedar la argolla
cuando te cobren el viaje nena?
yo sí, cual ojo e buey
jueves, agosto 24, 2006
lo siento
la mini perrita ve fantasmas
que los siente dice
cuando están ahí
yo quiero correr su hilo dental
rosa
estar adentro suyo
un rato
sin nada
y que me sienta
cuando estoy ahí
que los siente dice
cuando están ahí
yo quiero correr su hilo dental
rosa
estar adentro suyo
un rato
sin nada
y que me sienta
cuando estoy ahí
martes, agosto 22, 2006
así no se puede
vuelvo del fin de semana largo
la pendeja me rompe la boca
de movida nomás en el desayuno
la otra perra con el hilo dental rosa
recontra metido en el culo
me quieren quemar la gorra
así no se puede....
la pendeja me rompe la boca
de movida nomás en el desayuno
la otra perra con el hilo dental rosa
recontra metido en el culo
me quieren quemar la gorra
así no se puede....
jueves, agosto 17, 2006
en llamas
la pendeja quiere que la filmen
yo sueño muchas tomas
en que ella agarra el micrófono
y canta hasta acabar
yo sueño muchas tomas
en que ella agarra el micrófono
y canta hasta acabar
miércoles, agosto 16, 2006
lunes, agosto 14, 2006
viernes, agosto 11, 2006
martes, agosto 08, 2006
Exceso púber
Una vuelta, cuando iba a la secundaria y vivía con mis viejos, me hice seis pajas en un día. Cuando me levanté a la mañana siguiente para ir al colegio, entré al baño de los hombres (mi vieja y mi hermana iban al otro) a hacer pis como todos los días, mientras mi viejo se afeitaba y escuchaba la mañana de julio lagos. Me saludó, y al relojearme por el espejo se dio cuenta de que me trataba la herramienta con demasiado cuidado. Entonces me preguntó: ¿qué te pasa, te pescaste algo?. Yo le contesté que no, que se me había paspado un poco nomás. A ver, me dijo. Y cuando le mostré que tenía la cabeza y la piel moradas, se cagó de risa y me tiró: nene, no te hagás tanto la paja que tenés una sola y te tiene que durar para toda la vida. Yo me puse colorado mientras la guardaba de vuelta adentro del pijama.